¿Qué sucede realmente durante un Service básico?

Los propietarios o coleccionistas de relojes mecánicos, cuida sus relojes como un preciado tesoro. La propiedad responsable incluye llevar sus relojes periódicamente a revisión. Sin embargo, muchas personas se sorprenden cuando descubren por primera vez que un Service básico puede costar cientos de euros/dólares. Entonces surge naturalmente la pregunta: ¿qué sucede realmente durante un servicio de mantenimiento?

Este artículo está dirigido principalmente a aficionados a los relojes relativamente nuevos. Es posible que el tema ya resulte bastante familiar para los coleccionistas experimentados. Pero, de nuevo, nunca se sabe. Quizás aprenda algo después de todo. 

¿Por qué es necesario realizar Service a un reloj?

Empecemos con la pregunta más básica: ¿por qué necesita un Service? La respuesta es bastante simple. Un reloj mecánico consta de decenas o incluso cientos de componentes, muchos de los cuales están en movimiento. Esto significa que hay puntos de fricción en todo el movimiento de un reloj: engranajes que se engranan y pivotes que giran en cojinetes de rubí sintético, por ejemplo.

Esas piezas están lubricadas con aceites. En el pasado, se trataba de aceites naturales, obtenidos, por ejemplo, de cachalotes. Hoy en día son aceites sintéticos, con fórmulas especializadas para diferentes aplicaciones. Los aceites naturales del pasado se espesarían y ensuciarían lentamente. Con el tiempo, eso impediría que un reloj funcionara por completo. Por el contrario, los aceites sintéticos se evaporan y las piezas se secan.

Naturalmente, cuando un reloj deja de funcionar, lo llevas a un relojero para que lo arregle. Pero cuando los aceites modernos se evaporen, su reloj seguirá funcionando. En este punto, sin embargo, puedes imaginar que las partes comienzan a devorarse entre sí a un ritmo acelerado. Una vez que te das cuenta de que un calibre básico ETA 2824, que funciona a 28.800 pulsaciones por hora, “pulsa” más de 250 millones de veces al año, puedes imaginar lo que eso le hace a las diminutas piezas metálicas de su interior.

Paso 1: Inspección y diagnóstico

Cuando acude al Centro de Recepción, el primer paso suele ser una inspección visual del reloj. El personal verifica si el reloj ha recibido un golpe fuerte, por ejemplo. Cualquier daño estético, como rayones, generalmente se registra para evitar discusiones posteriores.

A continuación, se prueban las funciones del reloj. El técnico le dará cuerda, sacará la corona y pondrá la hora. A continuación, el reloj pasa a un cronógrafo para medir su rendimiento. El relojero no sólo se fija en el cronometraje sino también en la rotación del volante. Esto se muestra como “amplitud” y se representa en grados de rotación. Luego los resultados se registran para referencia posterior.

A continuación, el relojero abrirá la caja para realizar una inspección visual del movimiento. Algunos “descascarán” completamente el movimiento en este punto y harán una estimación del trabajo requerido y el costo involucrado. En este punto, es posible que ya se haya trabajado más de una hora. Es por eso que algunas marcas cobran una tarifa por “devolución sin reparar” si decide rechazar una cotización de servicio.

Paso 2: Desmontaje y limpieza

El siguiente paso en un mantenimiento regular de un reloj es el desmontaje completo del movimiento. Aquí es donde vemos diferencias claras entre un servicio “adecuado” y reparaciones rápidas y sucias. 

Un correcto mantenimiento incluye el desmontaje completo del calibre, hasta el último tornillo. Los técnicos clasificarán y colocarán concienzudamente todas las piezas en cestas, manteniéndolas agrupadas para volver a montarlas fácilmente más tarde.

Luego, las piezas se “lavan” o limpian en una solución mientras se bombardean con vibraciones de “ultrasonido” de alta frecuencia. También pueden limpiarse con vapor. El objetivo aquí es eliminar todos los aceites viejos y la suciedad que se haya podido acumular. Esto incluye virutas de las propias piezas.

Paso 3: reensamblaje y reemplazo/reparación de piezas

Una vez que las piezas estén perfectamente limpias, llega el momento de volver a armar el movimiento. Previamente el técnico inspeccionará minuciosamente las piezas a lo largo del camino. Si un pivote, por ejemplo, se ha desgastado un poco, es posible que su soporte se tambalee ligeramente. Esto puede causar todo tipo de problemas y un desgaste acelerado en el futuro. Por lo tanto, se sustituirá dicha pieza.

Si su reloj tiene un calibre antiguo poco común, es posible que la pieza ya no esté disponible. Es posible que tengamos que pedirlo a fábrica, lo que a veces puede llevar meses. Alternativamente, recrear la pieza puede ser la única opción, lo que puede resultar muy costoso. Esta es una de varias razones por las que un movimiento común probablemente le brindará la experiencia más sencilla.

Lubricar el movimiento de un reloj es un trabajo muy preciso. No se trata de dejar caer un poco de aceite sobre las piezas móviles. Aquí no estamos engrasando una cadena de bicicleta o una puerta que chirría. Cada calibre tiene tablas de lubricación específicas, que indican al relojero qué tipo de aceite insertar, dónde y en qué cantidades.

Paso 4: Caja, pulsera y cristal.

El movimiento ya está listo para volver a armarse. Pero es posible que también haya que trabajar un poco en la caja del reloj, la pulsera y/o el cristal. El cristal generalmente se reemplaza por uno nuevo si no está en perfectas condiciones.

También se limpian la caja y la malla. Al igual que en el interior del calibre, la suciedad también acelera el desgaste del brazalete metálico. La grasa de la piel combinada con el polvo y la arena forma un compuesto de pulido muy eficaz que provoca que la pulsera se estire. Por lo tanto, mantener tu pulsera limpia es algo que puedes hacer tú mismo para prolongar su vida útil.

Parte del trabajo obligatorio es reemplazar todos los sellos. Estos se secan con el tiempo, comprometiendo la resistencia al agua.

Paso 5: Regulación y control de calidad

Después de volver a montar el reloj por completo, el técnico lo regulará. En los relojes más recientes, esto se hace dentro de las especificaciones del fabricante. En los relojes antiguos esto ya no siempre es posible. El rendimiento del reloj se mide en diferentes posiciones. El relojero puede realizar ajustes de diversas formas según el tipo de mecanismo de regulación utilizado en el calibre.

Luego se mide el rendimiento del reloj a lo largo del tiempo para ver si todo funcionó correctamente. La reserva de marcha y el cronometraje deberían funcionar según las especificaciones, al igual que la resistencia al agua.

¿Cuánto tiempo lleva realizar un Service?

Un Service completo, excluyendo el trabajo de caja y pulsera, puede tardar varios días. Un calibre simple que sólo funciona con hora puede ocupar la mayor parte de una jornada laboral. Una gran complicación puede tardar una semana completa en un servicio regular. Un buen service no se puede hacer a las apuradas.

Enviar un reloj para un Service, en general, puede llevar semanas o meses. Esto puede deberse a la capacidad y la carga de trabajo del equipo. Dependiendo del proceso del relojero, la parte de control de calidad del servicio de relojería puede tardar 72 horas.

Pensamientos finales

Como puede ver, hay muchas cosas que entran en juego en Service. Además, el trabajo en sí no es precisamente fácil. Se necesita mucho entrenamiento y experiencia para tener una idea adecuada de los matices más sutiles que hacen que un reloj funcione. Para colmo de males, el número de personas que pueden realizar este trabajo al nivel deseado está disminuyendo.

Entonces, digamos que, en promedio, un Service dedica entre ocho y diez horas de trabajo especializado. Ahora multiplique eso por la tarifa por hora que crea que es razonable para artesanos altamente calificados. Agregue materiales, gastos generales y margen para la marca/minorista y comprenderá rápidamente por qué un servicio de relojería es tan costoso.

En una apuesta por la eficiencia, en algunas marcas simplemente se reemplaza el calibre. En el extremo inferior del espectro, los calibres pueden estar diseñados para ser descartados por completo. Algunas marcas, sin embargo, reemplazan el calibre por uno reacondicionado y luego revisan su calibre para colocarlo en el reloj de otra persona. Este puede ser un enfoque eficaz, pero no es muy apreciado por los aficionados que prefieren mantener el reloj como está. Si esto le preocupa, consulte antes de entregar su reloj.

Si tiene una duda lleve su reloj a Centro de Recepción y con gusto lo asesoraremos.

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